Torre del Cambrón – Hotel Salobreña
La Costa granadina tiene además de estupendas playas, una buena cantidad de lugares históricos para visitar. Hoy hablaremos de la Torre del Cambrón, una atalaya de vigilancia situada en un lugar estratégico para la defensa de la costa, cerca del barranco Cambrón. En el límite de los términos municipales de Salobreña y Almuñécar. Para ver este monumento declarado B.I.C. desde 1985 nos tendremos que acercar hasta el Hotel Salobreña.
Cerca de la piscina del hotel, rodeada de césped y palmeras, en un enclave impresionante, se alza esta torre circular de más de 10 metros de altura y casi 4 metros de diámetro, con un refuerzo ataluzado en la base.
La torre del Cambrón consta de dos pisos y plataforma. Está realizada con mampostería dispuesta en hiladas, encintadas por una línea de ripios, todo ello enlucido con mortero de cal. La torre es maciza en sus dos tercios inferiores, mientras que el tercio superior es habitable.
La torre del Cambrón fue edificada por los nazaries, entre los siglos XIII-XV y remodelada posteriormente. En el siglo XVI dentro del programa de refortificación llevado a cabo por los Reyes Católicos se elevó en 2 metros la altura la torre original. En el siglo XVIII, la reforma más destacada, fue la construcción de un matacán defensivo con buharda, situado a casi 10 metros de altura, en la cara sur.
Una puerta-ventana a 5 metros de altura hacía de acceso principal a la torre del Cambrón. Ésta presenta un arco de medio punto, jambas de ladrillo y se dispone dirigida hacia el norte.
Torre del Cambrón
La cubierta de la primera sala es de bóveda semiesférica a modo de media naranja. Mientras que la de la sala superior es plana.
La Torre del Cambrón dispone de tres troneras abiertas hacia el este, el oeste y el sur. Cuenta además, con una escalera encajonada en el mismo paramento, que permite el acceso a la azotea, y la chimenea.
Al igual que otras de las torres-atalayas que encontramos por el litoral granadino, la Torre del Cambrón es de tipo “rebato”. Tenían como misión principal vigilar la costa y prevenir los ataques e incursiones de flotas enemigas, especialmente, de los corsarios y piratas berberiscos que se acercaban hasta la playa. Anunciaban a las atalayas y las poblaciones cercanas, con señales de humo por el día y hogueras por la noche, de la presencia de embarcaciones sospechosas, que se dirigían a tierra. Desde la Torre del Cambrón se divisan la Torre de los Diablos y el Castillo de Salobreña.
Para las labores de vigilancia, la torre del Cambrón contó en principio con tres torreros, a partir de 1764, con 1 cabo de torres y 2 torreros. Posteriormente, desde 1839 fue usada por el Cuerpo de Carabineros.
